Pronunciamiento de los miembros de FRENALCE Caracas ante el comunicado emitido por la sociedad Homo et Natura (Zulia), dirigido a las comunidades Zapatista Autónomas en Rebeldía

En el día de hoy, 23 de julio del 2007, los Integrantes de FRENALCE Caracas tuvimos conocimiento de la carta de hermanamiento «entregada en manos del sub. comandante Marco» cuyo contenido nos desconcierta (sin comillas) y nos pone en estado de alerta por la participación que tuvo el Profesor Lusbi Portillo de La Universidad del Zulia, en la reunión convocada por los estudiantes de la ULA, Daniel Ceballo y Carlos Luís Blanco, para la creación del Frente Universitario en solidaridad con las luchas reivindicativas de los pueblos indígenas.

 

 

 

 

 

El Colectivo que se suma a la convocatoria de los estudiantes de la Universidad de los Andes, surge ante la coyuntura política por la que atravesaba Venezuela ante las reacciones que se produjeron en un grupo de estudiantes universitarios quienes defendían los intereses económicos de la Empresa de Comunicación Privada RCTV, y rechazaban la decisión legítima que tomó el Estado Venezolano de no renovar la concesión a este canal privado.

Preocupados ante esta situación decidimos reunirnos y unificarnos por una lucha que concierne al pueblo venezolano y a sus futuras generaciones, que no se circunscribe únicamente a los espacios de la academia sino que se percibe en la calle con los trabajadores, obreros, campesinos, indígenas, mujeres y hombres de esta patria latinoamericana.

 

Mientras algunos grupos estudiantiles gritaban y desestabilizaban las calles de nuestro país exigiendo «libertad de expresión» (de la cual estaban haciendo uso legítimo), nosotro@s, estudiantes y pueblo nos identificamos con un proyecto de país que busca la liberación de la conciencia de los pueblos latinoamericanos y del mundo.

 

La recuperación de la identidad es una lucha que no pertenece sólo a los estudiantes, sino a todo un pueblo que se mantiene en resistencia.

 

Aquellos que no aceptamos la diferencia entre estudiantes y pueblo y todas aquellas categorías que pretenden dividirnos en nuestra causa, acudimos a la convocatoria para sumarnos a la voz que se constituiría a partir de un Colectivo Nacional, planteando la idea de un Frente más amplio en su denominación y acción.

 

Creíamos que se trataba de una iniciativa que surgía del seno de la voz estudiantil, sin tutelaje alguno y de una convocatoria a nivel nacional, pero en la citada reunión sólo nos encontramos con un grupo de estudiantes de la ULA (Núcleos: Trujillo y Mérida), UBV (Zulia), en compañía del Profesor Lusbi Portillo (miembro de la Sociedad Homo et Natura) y otro grupo de la misma Casa de Estudios en compañía de la Profesora Fátima Morales.

 

Conocimos en Caracas de esta convocatoria, por el trabajo adelantado que tienen algunos de nuestros compañeros del colectivo, con las comunidades Wuayuú del Socuy (Wuayumana) y del río Maché (Juyasirain), quienes desde un primer momento establecieron acciones para la articulación de actividades conjuntas para la defensa de los pueblos indígenas, teniendo como premisa: el compromiso establecido directamente con las comunidades y no direccionado por dirigentes o intermediarios, así como la consulta permanente a éstas, para el desarrollo de las dinámicas necesarias para alcanzar los objetivos establecidos en acuerdo con las sociedades indígenas en pie de lucha y en resistencia.

 

Sin embargo, la participación de Lusbi Portillo y la decisión asumida por el colectivo ante el problema del Carbón que afecta a las referidas comunidades como primera tarea del Frente, son acciones que cobran un nuevo significado y reafirman nuestras dudas por el contenido del comunicado antes referido con fecha del 20 de julio del 2007, dirigido a los compañeros Zapatistas, por la implicación política de su entorno.

 

 

La referida carta y algunos documentos audiovisuales distribuidos por la Sociedad Homo et Natura, aparentemente cuentan con el apoyo de voceros de las comunidades mencionadas anteriormente, lo que genera mayor confusión entre nosotros, porque no responde a lo acordado con éstos y refrendado únicamente en el valor que las comunidades otorgan a su palabra, inspirados en el principio protagónico representativo que involucra el desmontaje del modelo democrático representativo y partidista que contò con el total apoyo del Estado hasta 1999.

 

 

Estas acciones involucran el trabajo de diversos colectivos de la ciudad capital, por lo que nos vemos en la necesidad de pronunciarnos enérgicamente y despejar todas las dudas que puedan vincularnos con las ideas expresadas en los referidos documentos.

 

 

Como miembros del Colectivo para la Liberación de la Conciencia Etno – Ecológica (Caracas), queremos enfatizar que sí nos identificamos y asumimos como nuestras la lucha de los pueblos indígenas contra el Capital Trasnacional, y repudiamos todas las acciones que atenten contra el acervo cultural y ancestral, el territorio y los derechos humanos, presentes de forma natural en las dinámicas sociales de nuestras comunidades indígenas.

Cuando hablamos de una conciencia Etno-ecológica planteamos el rescate y difusión de los saberes ancestrales para que se incorporen en la dinámica de construcción del nuevo modelo social.

 

 

El gobierno venezolano hoy nos brinda la oportunidad de realizar esta acción y saldar parte de la deuda que tenemos con las generaciones futuras, por el saqueo de los recursos naturales y el descuido de su legado cultural, consecuencia directa del esquema rentista petrolero.

 

Atendiendo a la invitación del gobierno que ha reconocido el reclamo de nuestros pueblos originarios y muestra la intención política de iniciar el proceso para saldar una deuda social con más de quinientos años de antigüedad, asumimos esta lucha, tomando en cuenta que éste mismo gobierno ha brindando espacios para la participación de los herederos depositarios más directos en la discusión del Socialismo del Siglo XXI, que responde en su construcción teórica y política a la dinámica del Poder Constituyente y reconoce el aporte indo-americano como fundamental.

 

Dicho aporte consiste desde nuestro punto de vista, en la orientación que puede brindarnos éste elemento en la construcción de un modelo de sociedad que vuelva a la tierra, sin la premisa de la extracción de minerales y que además ofrezca una alternativa a la integración de la región latinoamericana que hasta ahora solo parece posible bajo parámetros energéticos, impuestos por el capital trasnacional.

 

Es por ello que la diversificación de nuestra economía y valores fundamentales deben estar basados en los principios de solidaridad y colectividad presente en nuestras comunidades indígenas, las cuales deben ser tomadas como referencia por su raíz pre-capitalista y su legítima resistencia.

 

 

Con la misma fuerza que nos impulsa a reconocer estas luchas como nuestras, desconocemos, junto a los pueblos indígenas, la manipulación mediática que se adelanta a nivel internacional por diversos personajes y corporaciones que se valen de la confianza que le dan los pueblos y colectivos para hacer campaña en contra de nuestro Presidente y Compañero Hugo Rafael Chávez Frías, y así dar continuidad al plan de desestabilización que pretenden desarrollar con apoyo internacional a través de los medios de comunicación, por ser el principal medio que entorpece la liberación de la conciencia como se evidencia en la no renovación a la concesión otorgada hace 53 años al Capital Privado.

 

Estamos concientes que el proceso de cambio que vivimos implica una nueva lectura de nuestra historia, que nos permite revalorizar los saberes originarios que conforman nuestra identidad como pueblos multiétnicos, pluriculturales y multilingües, tal como lo afirma nuestra Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que es ejemplo para el mundo por las condiciones en que se aprobó dentro del proceso constituyente, y las conquistas alcanzadas por los pueblos históricamente excluidos, reprimidos, silenciados e invisivilizados en nombre de la democracia y amparados en el tutelaje.

Anexamos los documentos originales que dan inicio a este debate, del cual esperamos la necesaria respuesta de los colectivos implicados y la urgencia de fijar postura como Frente Nacional, basada en una DESICIÒN COLECTIVA y no representativa como lo pretende la Sociedad Homo Et Natura y Makiralasa’lii quienes suscriben el referido documento contrariando el principio de colectividad que rige todas nuestras acciones, a tono con el legado de los pueblos originarios del continente.

Suscribimos este documento desde el FRENALCE Caracas:

América Chipamo (coordinadora)

Steward Millán (coordinador)

Amarilis Hidalgo

Francisco Villalobos

Yarumi González

Ronny Velásquez

José Enrique Solórzano

Manuel Armas

George Castillo

(varios firmantes)

~ por etnoecomerida en julio 30, 2007.